En este post, vamos a ver los principales errores de fundrising que cometen los CEOs y cómo evitarlos. El entorno de la inversión es a veces intimidante para aquellos empresarios que todavía están aprendiendo cómo funciona el entorno de las startups, mientras que otros emprendedores pueden abordar la recaudación de fondos con un enfoque demasiado confiado.
No cabe duda de que la recaudación de fondos es un proceso necesario para muchas startups y que aporta emoción y la perspectiva de un capital externo muy necesario. Vemos los principales errores de fundrising de los CEOs y cómo evitarlos.
1. Emprendedores que buscan una cantidad poco realista
Como hemos mencionado en blogs anteriores, un buen asesoramiento financiero es vital para el éxito a la hora de acercarse a los inversores. Conviene recordar que los inversores y las empresas de Venture Capital cuentan con una gran experiencia y un gran número de casos en los que basarse a la hora de tomar decisiones de inversión, y este conocimiento y experiencia es algo de lo que a menudo carecen los nuevos emprendedores al principio de su andadura.
Es importante abordar una ronda con las ideas muy claras sobre la cantidad de dinero que se va a pedir y para qué se va a utilizar.
Este conocimiento debe basarse en el asesoramiento de expertos y en proyecciones sólidas para evitar pedir demasiado o muy poco capital, al tiempo que se asegura una suma realista que ayudará a que el negocio crezca. La clave está en proporcionar una justificación concreta de la cantidad que necesitas recaudar.
2. Imposibilidad de delegar sufriendo así el impacto de una ronda de financiación
Los CEOs suelen subestimar el tiempo que consumen las rondas de financiación y no se dan cuenta de que el proceso puede apartarles del día a día de la empresa durante un periodo de tiempo considerable. Antes de dirigirse a los inversores y entrar en una ronda de financiación, deben asegurarse de que pueden contar con un equipo sólido que les ayude a lo largo del proceso con las necesidades cotidianas de la empresa.
El entusiasmo que sienten los nuevos empresarios que se lanzan a llevar a cabo el fundrising no debe verse eclipsado por las necesidades de la empresa que, en última instancia, pueden afectar a las métricas y al rendimiento general.
Por ello, deben tener en cuenta que tendrán que desconectarse de los asuntos cotidianos durante un tiempo y dejar a otros al cargo. Un gran número de startups han sufrido consecuencias reales en cuanto a la caída de las métricas durante el proceso de recaudación de fondos, especialmente cuando deben dar un paso atrás para participar en rondas intensas.
3. Subestimar los plazo de tiempo
Hay que tener en cuenta que una ronda de financiación típica puede durar entre 6 y 18 meses, estando los 6 meses en el extremo mínimo de la escala. Los empresarios a veces tienen una visión ingenua de la financiación, creyendo que puede durar uno o dos meses como máximo, y esto no podría estar más lejos de la realidad. Por lo tanto, recomendamos tener en cuenta unos plazos realistas y tomar precauciones para que la empresa no se vea comprometida en ausencia del CEO.
4. Recaudar dinero con los inversores equivocados
Buscar inversiones en los lugares adecuados es fundamental para el éxito de tu empresa. Aunque el dinero es importante, la experiencia suele ser el rey cuando se trata de hacer crecer una startup en fase inicial. Los inversores adecuados mostrarán un gran interés en tu proyecto y querrán realmente hacerlo crecer en beneficio de su inversión y del futuro de tu startup. Entrar en una ronda de financiación consiste en encontrar el equilibrio adecuado entre el tipo y la cantidad de capital que necesitas recaudar y la auténtica perspicacia de los inversores con los que planeas asociarte para tu esfuerzo de financiación. ¿Quieres saber la moraleja de la historia? Trabaje con inversores que entiendan lo que hace que su negocio funcione.
5. Ignorar los beneficios más amplios que ofrecen los inversores
La recaudación de fondos tiene que ver con el dinero. Sin embargo, los empresarios a menudo no miran el panorama general y no recogen las recompensas de la perspicacia, los conocimientos, la trayectoria y la pasión que aportan los inversores.
Teniendo en cuenta el tiempo y el esfuerzo que se invierte en la preparación y la participación en una ronda de financiación, no cabe duda de que es beneficioso para los inversores buscar una asociación estrecha con inversores de ideas afines que comprendan plenamente el plan de negocio de la startup y se sientan motivados por él, al tiempo que, en última instancia, trabajan para maximizar su éxito futuro.
6. No contar con un asesoramiento jurídico sólido
La captación de fondos puede ser a menudo un campo de minas legal. Los CEOs deben tener en cuenta que los contratos y acuerdos suelen contener numerosas cláusulas y un texto extenso que tiene que ser aceptado antes de la firma. Estas situaciones hacen que sea esencial para las startups recurrir a un asesoramiento y apoyo profesional, que es donde un abogado corporativo experto y versado se hace imprescindible. En The Startup CFO siempre recomendamos invertir en el asesoramiento de expertos, y más aún en la fase de la ronda de financiación inicial.
7. Falta de un buen seguimiento e información con los inversores
Otra área profesional que se suele pasar por alto es la gestión experta del CFO. Al buscar inversión, se espera que los directores generales presenten y expliquen detalladamente un plan de negocio, informes y previsiones. Esta gran cantidad de información requiere una planificación cuidadosa y la orientación profesional de un CFO con experiencia en el entorno de las startups y un historial de apoyo a las empresas a través de sus primeras rondas de financiación. En The Startup CFO, ofrecemos un apoyo integral a los emprendedores que buscan entrar en sus primeras rondas de financiación, y esto incluye planes de negocio e informes detallados.
